Emprender un viaje siempre es muy emocionante; cuando lo planeas quieres que sea perfecto, no perder el tiempo y visitar el mayor número de cosas posibles.
Esperas que el viaje sea perfecto, y tener un montón de recuerdos, fotos y momentos inolvidables.
Pienso que lo único que necesitas para disfrutar de un viaje, es olvidarte de todo aquello que dejas atrás, aquello que te preocupa y que en tu vida diaria te crea problemas. Deberías de dejar la mente en blanco y mientras vas en el trayecto disfrutar del paisaje y pensar en las cosas tan maravillosas que piensas hacer, de la gente que puedes conocer; porque como bien dicen todos los días se conocen cosas nuevas.
-Tan sólo recuerda desconectar del mundo y llevar contigo tu música preferida para poder disfrutarla durante el camino.