Tu juego se termina aquí.

Sentir la necesidad de gritar todo lo que piensas o sientes, pero no poder hacerlo por miedo a cómo él actúe en consecuencia, sentir un nudo en la garganta, un nudo en pecho que no te deje respirar.

Pero soy mucho más valiente que tú, y nadie va a evitar que grite a los cuatro viento lo que pienso, porque para quererme sólo a ratos prefiero que no me quieras, lo siento por ti, no existen medias tintas, o es todo o nada.

Lo nuestro se acabó aquí.

Esto va más allá, no podemos evitarlo.

La mayoría de las veces siempre consigo lo que quiero, pero tratándose de ti, no soy demasiado buena.

No pruebes a encontrar a una persona que sea igual a ti, así no la vas a encontrar, simplemente sucede de la forma más chistosa posible, y cuando sucede te das cuenta, porque sabes que no quieres que esa persona desaparezca de tu vida, y se convierte en tu día a día, consiguiendo una complicidad que pocas personas tienen, y aunque el tiempo pase y las cosas y sobre todo los sentimientos cambien en el fondo sabes que siempre habrá un hueco en tu corazón que le pertenecerá.

Aunque cuando me di cuenta de que no eres para mi, duele, no te imaginas cuanto pero sabes que pase lo que pase, te quiero en mi vida de la forma que sea, siempre.