Creo que hay sentimientos que no podemos reprimirlos que debemos dejar que salgan afuera y cumplan la funcionan por la que han sido llamados. Algunos llegan sin querer pero nos alegramos de que hayan aparecido y otros que pensamos que nunca llegarían, llegan de la peor forma y si no sabes controlarlos pueden echar a perder muchas cosas.
Creedme cuando os digo que yo antes no sabía controlar los sentimientos, de echo ahora solo en ocasiones lo hago, pero cuando consigues dominar lo que sientes y usarlo en el momento adecuado, sientes un orgullo hacia ti misma que esa satisfacción no puede dártela nadie.
¡Cuánto más seas capaz de dominar tus sentimientos y enfréntarlos más batallas ganarás, aunque la guerra nunca acabe!
No hay comentarios:
Publicar un comentario